Columna

INE: El desafío de preservar su independencia y autonomía

El INE es una institución central en la vida política mexicana. Su autonomía e independencia está en juego con la designación de cuatro nuevos Consejeros Electorales. 

Como ha ocurrido con otros organismos autónomos, existe una estrategia de debilitamiento a través de la reducción presupuestal. Debido a los recortes, el INE estará este año operando con un déficit de 284 millones de pesos. 

Se ha pretendido eliminar a los Organismos Públicos Electorales Locales y que sus funciones sean asumidas por el INE a pesar de la merma presupuestal que sufrió el instituto.  

Otra reforma que está en curso es la reducción de 9 a 3 años del periodo del Presidente del Consejo General del INE. Una reducción en principio ilegal ya que atenta contra la no retroactividad de la ley.

El próximo 3 de abril concluye el periodo de cuatro de los once Consejeros electorales, por lo que en breve iniciará el proceso para elegir a las personas que ocuparán su lugar en el Consejo General. El nombramiento de los Consejeros corresponde a la Cámara de Diputados, cuyo proceso debe cumplir los criterios de legalidad, transparencia, parlamento abierto y amplia participación ciudadana. Asimismo, en cumplimiento con las leyes de paridad de género, por lo menos dos de los Consejeros electos deben ser mujeres. 

Además, deberá emitir en los próximos días una convocatoria pública en donde se detalle las etapas del procedimiento, la integración del comité técnico de evaluación y fechas improrrogables para reunir los requisitos.

Posteriormente, la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) de la Cámara de Diputados emitirá una Convocatoria para la integración del Comité Técnico de  Evaluación, el cual se encargará de seleccionar a los candidatos que aspiren a ser Consejeros Electorales del INE. 

Este deberá estar integrado por siete personas de reconocido prestigio y sin filiación partidista, de las cuales tres deben ser nombradas por la Junta de Coordinación Política, dos por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y dos más por el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales. 

En esta etapa, consideramos de suma importancia que la Convocatoria haga énfasis en los perfiles de los integrantes del Comité Técnico, que no tengan conflicto de interés, que sean imparciales, objetivos e independientes al momento de revisar, evaluar y designar a los nuevos consejeros. Asimismo, es preciso que se de máxima publicidad a la información presentada por los aspirantes, para que se pueden evaluar públicamente su perfiles.  

Es necesario enfatizar que la Convocatoria que dé a conocer la JUCOPO debe especificar con claridad las facultades que tendrán los integrantes que formen parte del Comité Técnico y los requisitos para integrarlo. Asimismo, es necesario precisar que los integrantes no deben tener militancia político-partidista; además, debe dejar claro que en los acuerdos se buscará el consenso, lo cual evitará impugnaciones posteriores. 

Otro aspecto destacado es que éste pueda allegarse de todas las fuentes posibles de información, que les permita ponderar las cualidades y posibles defectos de los candidatos al puesto de Consejero. 

Si el Instituto Nacional Electoral, a resulta de los procesos en marcha, pierde o ve menoscabada su autonomía, las elecciones a realizarse en 2021 y la presidencial en 2024 estarán en entredicho. 

Sin elecciones confiables la democracia mexicana sufrirá un retroceso de décadas.