Columna

Retorno a clases, ¿es posible?

Por Roberto Rosas Jiménez

La decisión de regresar a las aulas debe estar fundamentada técnica, médica y profesionalmente. Está de por medio la salud y la vida de las y los niños, adolescentes y jóvenes, así como también del personal docente y administrativo de las escuelas.

Según una encuesta realizada por “El Financiero”, el 62% de los mexicanos está en desacuerdo con el regreso a clases; por ello, en Coparmex estamos comprometidos con recuperar la confianza para el regreso a clases seguro. Deseamos frenar el rezago educativo y el aislamiento que afecta a los niños pero, al mismo tiempo, garantizar su salud, la de sus familias y sus maestros.

La afectación en el proceso de aprendizaje y el debilitamiento de la motivación entre el alumnado son patentes y ponen al sistema educativo en una situación de urgencia. La evidencia confirma que la brecha educativa se ha ampliado entre los estudiantes de escasos recursos y aquellos que cuentan con herramientas a su alcance:

Datos de la OIT evidencian que un 9% de los jóvenes podría abandonar definitivamente sus estudios. Por su parte, el Inegi señala que de los 33.6 millones de estudiantes en el ciclo 2019-2020, 738.4 mil no concluyeron el ciclo escolar. A ello se suman los 5.2 millones de personas que se encuentran entre los 3 y 29 años de edad que no están escolarizados en ningún nivel educativo.

Para que el eventual regreso a clases sea seguro, Coparmex propone al menos las siguientes acciones:

  1. Creación de una Mesa permanente con la autoridad educativa. Donde todas las voces sean escuchadas
  2. Protocolos específicos con elementos que no pueden faltar: traslados de los estudiantes, su estancia en aulas, en espacios abiertos, y de detección y trazabilidad de contagios.
  3. Debe ser voluntario, gradual y con margen para la auto-gestión. Coparmex aplaude que el gobierno reconozca la capacidad de gestión de las escuelas, esto es necesario para que cada plantel determine sus horarios, sus espacios, su diagnóstico, y se les dote de recursos.
  4. Escuelas con presupuesto suficiente y equipadas. El gobierno debe garantizar que las escuelas cuenten con los materiales necesarios en materia sanitaria.
  5. Aprovechar la experiencia internacional. Es fundamental conocer la realidad de otros países. Aunque los casos con síntomas graves son poco comunes, eso no quiere decir que los niños no se conviertan en transmisores de la enfermedad y aún se siguen investigando las secuelas que el virus pudiera tener en su salud y desarrollo futuros.
  6. Los menores de edad también deben ser contemplados en el Plan Nacional de Vacunación. Por las razones comentadas con antelación y gracias a los estudios médicos recientes se confirma la necesidad de vacunar a los menores de edad contra el Covid-19.

En Coparmex deseamos el bienestar de los niños y jóvenes, de los padres de familia y de los docentes del país. Creemos que el regreso a clases es posible siempre y cuando se cuente con las condiciones para que sea seguro.

La vacunación es actualmente la principal estrategia de prevención de salud pública para combatir la pandemia del Covid-19, pero es indispensable que se contemple a los menores de edad y que no se abandone o subestime la implementación de medidas complementarias para reducir la propagación del virus. Si queremos que el retorno a las aulas sea exitoso debemos poner a la salud por delante y garantizar las condiciones para que todos tengamos confianza.

Retorno a clases, ¿es posible? – Infobaja de BC