Presupuesto irresponsable
El gobierno de México calcula tener ingresos en 2024 por 7.3 billones de pesos. Pero está planteando gastar 9 billones. No me cuadran las cifras.
El gobierno de México calcula tener ingresos en 2024 por 7.3 billones de pesos. Pero está planteando gastar 9 billones. No me cuadran las cifras. Se está proyectando un déficit presupuestal, y la manera de cubrir el faltante, será con deuda – que además en estos momentos los intereses están altos.
En el mundo empresarial, la deuda se destina hacia inversiones productivas que generen retornos por arriba del costo de la deuda. Es un pecado el endeudarnos para gasto corriente. El flujo generado por las inversiones se destina en parte para el servicio de deuda, y de esta forma, las empresas pueden escalar y crecer. En el caso de la deuda del sector gobierno, los funcionarios de gobierno que proponen y autorizan el endeudamiento, no tienen ninguna responsabilidad personal para el pago de la deuda. Somos los mexicanos los que asumimos el compromiso.
Pensaríamos que, con este nivel de endeudamiento proyectado, se estaría destinando fuertes inversiones para resolver los desafíos que más aquejan al país: SEGURIDAD, EDUCACIÓN, VIVIENDA, INVERSIÓN PÚBLICA, SALUD, APOYOS A MIPYMES, etc.
En el ramo de la Seguridad, se está proyectando un aumento real de 2% – me parece poco e insuficiente para tantos rezagos en esta materia. La SEDENA y MARINA ellos si tendrán aumentos arriba del 50%, pero recordemos que están a cargo de operar las aduanas y la construcción de las obras emblema. La SEP tendrá también un incremento menor al 3%, cifra que me parece raquítica para poder llevar a México hacia un sistema educativo de excelencia. Está claro que la educación no figura en las prioridades de esta administración.
En Inversión Pública, la inversión programada será de 1.1 Billones de pesos, una disminución real del 11%. La inversión física será de 888 mil md -una reducción de 23% respecto a 2023- y el 15% de este monto está destinado al tren Maya. Sería muy deseable que la inversión en infraestructura fuera mucho mayor y atomizada en todo el país, para fortalecer la conectividad y calidad de nuestras vías de comunicación y posicionar mejor a México como destino de inversiones (Nearshoring).
El presupuesto de la Secretaría de Energía aumentará 237% para apoyar a PEMEX (barril sin fondo). El sector salud tiene un incremento del 5.57% comparado con 2023, con un 2.9% del PIB cuando se requiere por lo menos el doble. El programa de vacunación también tendrá un tijerazo de 663 mdp, lo que equivale a una reducción del 4.5% vs 2023 y nos da una cobertura del esquema de vacunación de niños de un año de solamente el 27.5% (hace una década era el 90%), seguirá el desabasto en medicinas y las largas filas en el IMSS. Tampoco es una prioridad la Salud.
En el tema de la reducción de la pobreza, que este año vimos una baja en la pobreza general (la pobreza extrema aumentó), se estarán asignando 741.5 mil mdp a programas sociales. El 63% de este monto se irá a pensiones de adultos mayores que tendrán un 31% de aumento real. En un año electoral preocupa que se incremente tanto el gasto social, en donde la poca transparencia ha caracterizado a la actual administración, pues queda claro el objetivo: regalar dinero a cambio de mejorar la percepción y ser favorecidos con el voto.
Desde COPARMEX, exigimos un presupuesto responsable. No más deuda. Se prevé sea el sexenio con mayor endeudamiento en los últimos 30 años. Necesitamos transparencia y el blindaje de los programas sociales- y evitar la tentación de usarlos con fines político-electorales. Hacemos un llamado a todos los legisladores a revisar con detenimiento la propuesta de PEF 2024, para utilizar los recursos de la nación con inteligencia, y enfoque en las necesidades reales del país.